jueves, 27 de diciembre de 2012

Abusaron de mí, aunque no lo recuerde.

Abusaron de mí, aunque no lo recuerde
"Olvidar no es ni bueno ni malo. Cada persona sobrelleva sus situaciones como puede. Eso hace que cada uno, consciente o inconscientemente, escoja la forma de sentirse más protegido. Y esa fórmula pasa muchas veces por olvidar", explica Pilar Polo, psicóloga de la Fundación Vicky Bernadet, una institución que atiende desde hace más de 10 años a víctimas de abuso sexual.

El cerebro humano es sabio. Y busca mecanismos para enterrar lo que duele. Lo que hace sufrir. Eso que puede impedir llevar una vida normal. "Si lo vivido es doloroso la memoria puede suprimirlo", aclara Polo. Tanto, que ese mecanismo de defensa puede provocar que los recuerdos de un abuso sexual infantil duerman durante años. Queden tapados hasta que una situación, un comentario o incluso una película los despierten. "Para algunas personas ese bloqueo en la memoria es tan grande que pueden llegar a no tener ningún recuerdo de su infancia", explica Polo.

Rebeca A. J. sí se acuerda de cosas de cuando era pequeña. De aquella vez que se cayó de la bici y se rompió el brazo. O de ese verano en el que su abuela les preparaba a ella y a sus primos bocadillos de beicon para cenar. Sin embargo, hasta hace cinco años no tenía ningún recuerdo de los episodios de abuso que había sufrido por parte de alguien de su entorno familiar. Los había escondido tan al fondo de su mente que era como si no hubieran ocurrido. Pero, aunque esta mujer de 31 años no lo sabía, esos abusos le habían marcado la vida. "Tenía depresiones, angustia... Y llevaba un tiempo sufriendo bulimia", cuenta.

Un día, Rebeca -que no quiere dar su apellido porque sólo una parte muy pequeña de su familia sabe lo que sucedió- volvió a encontrarse con su agresor. No lo veía desde que era niña. Desde que ocurrió todo. "Encontrarme con él fue horrible. Pero no fue tanto verle como escucharle. Ese tono de voz, esas palabras empalagosas de cariño... Empecé a tener recuerdos de escenas sueltas. A revivir lo que había pasado", relata. Esa voz que despertó en ella aquello que había mantenido dormido le hizo pedir ayuda. Acudir a tratamiento para tratar de atajar las secuelas que el abuso sexual le habían provocado.

"Las víctimas de abusos sexuales que no han recibido ayuda pueden padecer problemas de relaciones sociales, de sexualidad, dificultades de entregarse sanamente a la pareja, baja autoestima...", explica Vicky Bernadet, fundadora de la institución que lleva su nombre y que atiende actualmente a unas 150 personas en sus programas de terapia. La propia Bernadet, que sufrió abusos desde los 9 hasta los 17 años, cuenta que ella también padeció algunos de esos problemas. "Fui una adolescente rebelde, rara... En el fondo buscaba llamar la atención", dice. Ahora tiene 56 años y una enorme vitalidad. Sus palabras emanan energía y habla de su situación con naturalidad y mirando a los ojos a su interlocutor. Su actitud contrasta con los años de silencio en los que se vio sumida. Bernadet vivió hasta los 34 años en la cárcel de su propio secreto. Hasta que su sobrina encontró unos poemas en los que había plasmado sus sentimientos hacia todo lo que había ocurrido. "Ahí se destapó todo. Fue el detonante que me hizo actuar", cuenta. Entonces buscó atención para su problema. Ayuda especializada. Terapias. Y no encontró nada. Así que decidió crear su propia institución para llenar ese vacío.

Y la respuesta ha sido inmensa. Su fundación, con sede en Barcelona, recibe cada día llamadas o correos electrónicos desde toda España pidiendo asistencia. Una situación que ha llevado a que un día a la semana sus psicólogas atiendan por teléfono a aquellos que están lejos y no han encontrado ayuda en su comunidad. Sólo hay que echar un vistazo a las cifras de varios estudios para comprender la magnitud del problema: entre un 20% y un 25% de las mujeres, y entre un 10% y un 15% de hombres españoles han sufrido abusos sexuales en la infancia. La cifra puede parecer alta, pero, según Bernadet, no lo es. "El abuso sexual no es sólo penetración", dice. De hecho, el National Center on Child Abuse and Neglect de Estados Unidos considera abuso sexual "todo contacto o interacción entre un menor y un adulto cuando éste utiliza al niño para estimularse sexualmente a sí mismo, al propio niño o a otras personas".

El abusador, como en el caso de Rebeca, de Vicky y de tantos otros, suele ser, además, alguien cercano al niño. Una persona de su familia -un tío, el hermano, el padre- o de su entorno -vecinos, amigos de los padres, profesores, monitores-. En unas polémicas declaraciones, el obispo de Tenerife hacía ayer referencia a esta realidad para defender a la Iglesia tras los últimos escándalos de abusos de sacerdotes. En declaraciones a la SER, dijo que estadísticamente la mayor parte de abusos y malos tratos a niños se dan en las familias.
Los expertos apuntan a que el agresor suele ser una figura de referencia para el menor. Alguien en quien este confía, lo que hace mucho más difícil que el niño hable. O simplemente que piense que lo que le está ocurriendo no es normal.

Y esa es otra de las fórmulas de olvido. Casi nadie recuerda las situaciones que considera comunes, ordinarias. Las cosas normales quedan tan diluidas que si intentáramos acordarnos de todas las revisiones médicas a las que nos hemos sometido no podríamos. Tampoco de los taxis que hemos cogido. "Sólo se recuerdan las cosas que destacan. Que nos llaman la atención por algo", apunta Clara González, psicóloga experta en abusos sexuales. Y ese es uno de los argumentos que muchos adultos que abusan de niños emplean. "Manipulan a los niños y muchas veces a su entorno para hacerles creer que todo lo que está ocurriendo es normal. Esto es lo que ocurrió probablemente con José Ángel Arregui. Hizo pensar a sus víctimas que las cosas que hacía eran normales", sostiene Polo.

De pequeña, cuando todo empezó, Bernadet creía que lo que le ocurría a ella les pasaba también a los otros niños. "Luego descubrí que no. Y fue angustioso. Pensaba: esto no puede estar bien; no puede estar bien si no puedo mirarle a los ojos", recuerda. Pero, al fin y al cabo, él era el adulto. El que sabía. La psicóloga Pilar Polo explica que los agresores hacen creer a los niños que lo que está ocurriendo es correcto. "Para un niño una cosa es mala cuando es violenta, y el abuso sexual infantil muy pocas veces tiene violencia física. Muchas veces los niños no saben dónde está el límite, y menos con una persona a la que respetan, en la que confían", sostiene. Y ahí está otra de las claves: los abusadores hacen creer a sus víctimas que son especiales para ellos.

"La autodefensa para muchas víctimas es ir tapando lo que les ha sucedido, lo que les está pasando", explica Tina Alarcón, directora del Centro de Asistencia a Víctimas de Agresiones Sexuales (CAVAS). "Esto no ocurre en las agresiones sexuales pero sí en los abusos. Si además el niño es muy pequeño y el abuso no ha sido doloroso se puede llegar a olvidar. Y si lo ha sido se puede llegar a crear una costra de olvido para tapar el sufrimiento", asegura Alarcón. "También se puede llegar a negar internamente lo que pasó. O hacerse creer a uno mismo que lo que sucedió no fue grave. O que no afecta, que ya se tiene superado", añade.
En el caso de Cristina Fernández, su verdugo era también, para el resto del mundo, su defensor. "Tenía todo con él. Me defendía y abusaba de mí. Recuerdo que cuando empecé a mostrarme rara con él algunos miembros de mi familia de decían: 'Pero cómo le dices eso, cómo te portas así con él, con lo que te defiende, con lo que te llega a querer'. Y lo que me quería... Lo quería todo conmigo. Me lo daba todo, todito, todo. 'Pues no me quieras tanto', pensaba yo", dice. Y se ríe de ese pequeño chiste que ha deslizado durante la conversación. "Ahora me río, intento bromear sobre ello. Eso es un síntoma de que me estoy recuperando", dice.

Cristina, como Vicky Bernadet, recuerda perfectamente los abusos. Es más, ninguna de las dos tiene ningún otro recuerdo de su infancia. Sólo oscuridad. Esa es, según Pilar Polo, una de las características comunes de las personas que empiezan terapia por haber sufrido abusos sexuales de pequeños. "Yo no me acuerdo de nada. Ni de la primera comunión, ni del primer día de colegio. Quieres borrarlo todo y acabas enterrando lo bueno y lo malo", explica Bernadet. Y apunta otra anécdota: "Hasta hace nada, si intentaba recordar mi imagen de cuando era pequeña me veía como una niña sin cara. Veía mi cuerpo, mi silueta, pero no tenía rostro". Un día, durante una conferencia para hablar de abusos sexuales, Bernadet por fin se vio. "Supongo que no me recordaba porque no me gustaba nada tener cara siempre de niña triste, cuando soy una persona muy alegre. Quizá esas ganas de ocultar la mala cara, esa máscara que llevé durante años para que nadie se enterase de lo que estaba ocurriendo provocaron después que me viera así, pixelada", dice.

A Cristina, de vez en cuando, le vienen a la cabeza flases, escenas de esos abusos. "Cuanto más tranquila estoy y más me relajo, más me ocurre", cuenta. Esta mujer de 46 años no asumió hasta los 38 lo que le había pasado. Para poder seguir viviendo, había enterrado sus recuerdos de los abusos. Pero había empleado una fórmula diferente de la de olvidar. Bloqueó toda emoción, todo sentimiento hacia esas vivencias.

Así, a los 38 años, después de ver a Bernadet en televisión, de leer varios libros, de acudir a terapia para solucionar otros problemas que después resultaron ser consecuencia de los abusos, decidió ir a la fundación catalana. "Pensé: '¿Quién es esa loca que habla de lo que le ha ocurrido a cara descubierta?", bromea mirando a Vicky, sentada frente a ella. Esa aparición en un reportaje televisivo llevó a las terapias y grupos de apoyo de la fundación a muchas personas más -víctimas, pero también familiares y amigos-.

Mireia Apesteguía, trabajadora social de la Fundación Vicky Bernadet, explica que las noticias sobre abusos sexuales, las apariciones en televisión hablando del tema o el descubrimiento de escándalos como el que está aflorando ahora en el seno de la Iglesia católica hace que mucha gente se decida a pedir ayuda. Algo fundamental para poder superar el abuso infantil. "A veces algo provoca que el cerebro haga clic y empiece a recordar todo lo que estaba dormido. Algunos han rememorado así los abusos que sufrieron. Otros simplemente siempre los tuvieron presentes, pero los han asumido, han llegado a la conclusión de que necesitan ayuda y deciden dar el paso", explica.

Apesteguía lo sabe muy bien. Es la persona que atiende a las víctimas que acuden a la organización por primera vez. Habla con ellos en una de las acogedoras salitas del piso de la fundación en el centro de Barcelona. Habitaciones donde nunca falta el paquete de pañuelos de papel sobre la mesa.

El olvido, pero también el bloqueo de sentimientos hacia lo sucedido, ocurren, según la directora de CAVAS, fundamentalmente cuando se guarda silencio sobre el tema. "Cuando el niño no contó lo que estaba ocurriendo. En los casos en los que se guarda silencio es muy difícil restaurar después el equilibrio de la persona", dice.

Polo, Bernadet, Alarcón... Profesionales y víctimas llaman la atención sobre la necesidad de prevención. Y de detección. "Hay que observar, sin llegar a caer en la sobreprotección, el comportamiento de los niños. Estos muchas veces nos dicen, sin hablar, lo que les pasa", dice Alarcón. "También hay que cuidar mucho cómo reaccionar si el niño -o luego, más tarde, el adulto- nos confía que está siendo víctima de abusos", aconseja Bernadet. Es la única manera de que estas víctimas no entren en la cárcel del silencio. Una prisión que, muchos, tardan años en abandonar. Otros no la dejarán nunca.

fuente: http://www.soyborderline.com/index.php/documentacion-y-articulos/ultimas-noticias/10281-abusaron-de-mi-aunque-no-lo-recuerde.html

sábado, 15 de diciembre de 2012

CIEGOS, CIEGOS Y MAS CIEGOS...

Me he enterado de que una pequeña niña, ex alumna de mis pasantías, recientemente ha dado a luz, a lo sumo tendrá 12 0 13 años pero no es éste el problema, si no que según se rumora en la comunidad ese pequeño ser inocente que acaba de nacer es producto del abuso sufrido por esta niña por parte de su padrastro. En casa al parecer la solución momentánea fue esconder a la niña para que no se notase el embarazo (ahora ya nacido ese bebé no se como piensan esconderlo). 

Lo peor es que tal vez la madre lo sepa y prefiera hacerse la loca, por lo cual ya han encontrado a otro adolescente para acusarlo del embarazo. Cosa que el chico ha negado rotundamente. 

Lo mas atroz que ésta niña esté soportando humillaciones, maltratos psicológicos y verbales por parte de su entorno familiar y que ella lo esté soportando por no tener a donde ni a quien acudir, porque es una niña con otra niña, desarmada, inocente, sin medios de defensa, sin un hogar. 

Me siento indignada y con una enorme rabia porque éstas atrocidades sucedan frente a las narices de todos y prefieren mirar a otro lado. Que estoy llena de rabia y de odio? Si hermanas, lo estoy, porque esa niña al igual que yo y que muchas otras no teníamos que vivir ese infierno. Porque nadie nos defendió, porque se arruinó nuestra vida cuando lo único que queríamos era ser felices. 

Recuerdo que hace algún tiempo en nuestra comunidad y a pocas calles, un padre abusaba de sus dos hijas y una de ellas terminó embarazada. Gracias a Dios una de las chicas huyó y contó lo sucedido a un hombre que la ayudó y se dirigió a la policía  siendo en este caso que la justicia actuó con rapidez y el hombre fue llevado a un penal en el que poco tiempo después murió de un ataque al corazón.

Espero poder ver a mi niña nombrada al inicio para conversar y constatar los hechos de los que se hablan para brindarle toda mi ayuda y denunciar a ese canalla...

No peor aún es el caso de una conocida a quien su pareja le está rondando a su hija (adolescente también), incluso se le ha insinuado a la nena. La chica ha sabido responder muy bien y defenderse, evitando así ser destruida. Ha hablado con su madre y le ha contado lo sucedido, después de innumerables llamadas telefónicas y mensajes que le envió el mal nacido pidiéndole que no contase nada porque ella había mal interpretado las cosas. Con la lamentable decisión de su madre de continuar con el susodicho y pedirle a su hija que no le contase nada a nadie sobre lo ocurrido.

No entiendo eso, por qué seguir con él haciendo caso omiso de lo que cuenta su propia hija, su sangre?

Hasta cuando se hará la loca? Hasta que ocurra lo peor?  Dios, cuida y protege a esta nena para que por la desgraciada decisión de su madre no termine dañada por el hombre que ésta prefirió.

En este momento me siento muy bien de haber denunciado a quien tenía que denunciar, de haber creído en mi hija. Porque es mi hija, es uno de los tesoros mas grandes que tengo.

No importa lo que digan o piensen los demás, yo siento que a pesar del mundo hice lo correcto.

Hablar, hablar y hablar, o como dice cierta persona, vociferar, vociferar y vociferar, tal vez muchos piensen que es vergonzo o mal intencionado, pero no lo es. Al contrario es sanador y además es así como se rompe la cadena de abusos y como se puede lograr acabar con este flagelo que consume a la humanidad.

Estoy tan cansada de ver que no se haga nada... Siempre la culpa es de la victima, porque se vestía sexy, porque lo provocaba, porque ella quería, porque, porque, porque... Ya basta de tanta hipocresía...




domingo, 9 de diciembre de 2012

DECÁLOGO. IMPORTANTÍSIMO, NO DEJES DE LEERLO

Decálogo: Este documento tiene toda la información sobre el abuso sexual infantil.
Tienes que leerlo.

Porque "Todos conocemos a un sobreviviente de abuso sexual infantil."


Hay temas que se resisten a ser tratados porque son muy penosos, pero hacerlos visibles es la forma en que podemos evitarlos e incluso advertirlos.
Hablar de prevención de abuso sexual infantil puede ser doloroso, pero es un tema que debemos abordar.

La mayoría de los actos de violencia contra los niños son perpetrados por personas
que forman parte de su vida: padres, profesores, compañeros de clase, empleadores y cuidadores.

Si lees esto, y lo réplicas, tal vez estés contribuyendo a erradicar el abuso sexual infantil y salvando un niño. ¿Crees que vale la pena?

La violencia sexual infantil: es "toda la conducta en la que un menor es utilizado como objeto sexual por parte de otra persona con la que mantiene una relación de desigualdad, ya sea por la edad, la madurez o el poder. " Esta definición se escucha clara y muy conceptual, pero no nos dice nada.

Tal vez si lo leemos más claro, podremos visualizarlo y por consiguiente o dejaremos de leer porque lo que leemos nos parece muy malo para que suceda o ponemos mucha atencion y tomamos apuntes para prevenir y cuidar a nuestros hijos, hermanos, familiares o vecinos antes de que sea demasiado tarde para hacerlo.

"Tener relaciones sexuales genitales u orales (cunnilingus, Felación) con un niño o niña. Penetrar en el ano, vagina o boca del niño con el dedo, pene u objetos extraños. Tocar o manipular los genitales del niño o niña. Obligar al menor a tocar los genitales del agresor o manipularlos, a menudo bajo la apariencia de “juego”. Frotar el pene contra el cuerpo del niño o niña. Besar al pequeño de forma muy íntima. "

¿Se escucha muy fuerte? ¿quizás muy difícil de imaginar que un padre, hermano, abuelo, religioso o vecino sea capaz de realizarlo?

Pero los abusos sexuales infantiles no terminan ahí. "También lo son otras cosas como mostrar los genitales, hacer que el menor vea a otras personas realizar practicas sexuales u obligarle a que las tenga con una tercera persona.
También son abusos mostrar ilustraciones y/o películas pornográficas al niño, o hacer fotografías y/o películas pornográficas del/con el niño.
Obligar a un menor a masturbarse en su presencia física o virtual, que se desnude ante la cámara de su ordenador o mostrar gestos y palabras obscenas es otra forma de abuso sexual."


Estadísticas: Las estadísticas son escandalosas:

"Cada año aproximadamente 150 millones de niñas y 73 millones de niños en el mundo son víctimas de violación y/o de violencia sexual.

1 de cada 4 niñas es abusada sexualmente antes de cumplir 18 años.
1 de cada 6 niños es abusado sexualmente antes de cumplir 18 años.
1 de cada 3 niñ@s ha tenido contacto por internet con un pedófilo sin saberlo.
1 de cada 5 niñ@s es abordado sexualmente a través de internet.

Casi el 70% de todos los asaltos sexuales (incluyendo los asaltos a adultos) ocurren a niños de menos de 17 años.
Entre el 30 y el 40% de las víctimas son abusadas por un miembro de la familia.
Otro 50% son abusadas por alguien fuera de la familia, pero a quien conocen y en quien confían.
Aproximadamente el 40% es abusada por algún niño mayor conocido.
Sólo el 10% es abusada por un extraño.
El abuso sexual puede ocurrir a cualquier edad, e incluso más tempranamente de lo que piensas:
La edad media de los abusos sexuales denunciados es de 9 años.
Más del 20% de los niños es abusado sexualmente antes de cumplir 8 años.
Cerca del 50% de las víctimas de sodomía, violaciones con un objeto y tocamientos forzados son niños menores de 12 años.
La evidencia de que un niño ha sido abusado sexualmente no es siempre obvia, y muchos niños no cuentan que han sido abusados. La mayoría de los niños no revela haber sido abusado, incluso si se le pregunta:
Más del 30% de las víctimas nunca revela la experiencia a NADIE. Las víctimas pequeñas pueden no reconocer su victimización como un abuso sexual.
Más del 80% de las víctimas niegan o son reacias a revelar el abuso. De las que sí lo revelan, aproximadamente el 75% lo hace accidentalmente. De aquellas que sí lo hace intencionalmente mas del 20% eventualmente se retracta aunque el abuso efectivamente haya ocurrido. El miedo es demasiado grande.
Las falsas acusaciones constituyen sólo entre el 1 y el 4% de las denuncias. De éstas, el 75% son realizadas por adultos y el 25% por niños. Los niños sólo realizan falsas acusaciones el 0,5% de las veces.

Cada año, 896 mil menores norteamericanos son víctimas de abuso sexual, agresión física, negligencia o bullying.
Un niño estadounidense cada 35 segundos es molestado sexualmente, abusado, víctima del “bullying” u otra agresión.

Se estiman en 165 mil los niños en el país que faltan un día a clases, por abuso sexual o de cualquier otro tipo.

Son 896 mil niños anuales, víctimas de abuso infantil y negligencia.
Hay un agresor sexual infantil en cada milla cuadrada del país y cada uno de ellos, hostigará, molestará, afectará o abusará de entre 30 y 50 niños, antes de su primer arresto.

Se estima en 797 mil 500 niños reportados desaparecidos cada año, en 40% de estos reportes, el menor fue asesinado.

Y el 83% de las veces, el rapto o secuestro se pudo haber evitado si el niño hubiera sabido qué hacer en el momento, como correr, gritar o incluso contraatacar."

Las cifras son frías, y el abuso sexual infantil es mucho mas que esas cifras que mucho se niegan a creer. Cifras que nunca las vas a obtener de portales de gobiernos o instituciones.

Si aún sigues leyendo tienes que desterrar los siguientes mitos de tu cabeza:

Mitos:

"-Los abusos siempre van acompañados de violencia.
-Los abusadores son hombres con problemas psicológicos muy aparentes o enfermos psiquiátricos, las victimas, niñas.
-La mayoría son desconocidos.
-Un niño es abusado sólo por un adulto.
-Los adultos son los únicos que abusan de niños.
-Si le ocurriera a un niño de nuestro entorno, nos daríamos cuenta.
-Ante la detección, la familia actuará.
-No es obligatorio denunciar, es cosa de la madre, ella lo denunciará de inmediato.
-Si denunciamos, será peor para el niño porque lo separarán de su familia.
-Sólo se da en el tercer mundo, en determinadas clases sociales, familias des estructuradas y nivel sociocultural muy bajo.
-Los niños “incitan” sin querer, no dicen la verdad o exageran.
-Los niños pueden decir “no”, y cuando les ocurre, lo cuentan de inmediato.
-Los niños abusados se convierten en abusadores.
-El abuso infantil es poco frecuente - En la actualidad se producen mas que antes.
-Los efectos no son muy traumáticos
- Sus consecuencias no son graves, los niños tienen la capacidad de olvidar los traumas.
-No se puede prevenir. "

La mayoría de las víctimas sufrieron abusos sin ningún tipo de violencia, las estadísticas así lo señalan. Las tácticas de los abusadores son el engaño y la manipulación.

Cuando se trata de abuso intrafamiliar, es decir, que su víctima está muy cerca de él y tiene acceso en cualquier momento, su estrategia está muy bien medida. No tienen prisa, saben que tienen el alimento en casa y se pueden dedicar años a pulir su estrategia. Saben y conocen a toda la familia del menor, conocen perfectamente sus puntos débiles, lo que le gusta al niño o niña y que sus padres le tienen dosificado o prohibido para así ganarse su confianza.

Ejemplo:
Por ejemplo, si el tío R. sabe que a M no le dejan comer chocolate, R. le dará chocolate a la niña. M. le querrá por eso, porque la trata bien, juega con ella y le da chocolate a escondidas. Y un día, el tío R. toca “raro” a M. Y a continuación le pide que no diga nada. A cambio, el tío R no dirá que M. come chocolate. Y la trampa se cierra, porque ella no dirá nada si no quiere delatarse a sí misma. Para ella, tocar “raro” y comer chocolate sin permiso de mamá son dos “delitos” iguales y no se deben contar. Uno de esos “delitos” le da miedo y la hace sentir enormemente mal, el otro le gusta porque a los niños les encanta el chocolate, pero en su mente infantil no puede hablar ni del uno ni del otro sin delatarse. Y el abuso irá in crescendo, y la niña se irá sintiendo cada vez mas culpable. Porque si no se quejó cuando le tocó “raro” por primera vez, menos aún cuando sea ella la que toque a su tío cuando él se lo pida… Empiezan jugando y cuando el menor se da cuenta ya no hay marcha atrás, ya no se puede escapar, ya no se puede decir que no, porque es demasiado tarde, es demasiado vergonzoso. "

¿Quienes son los violentadores sexuales?

Borra la imagen del enfermo con gabardina que se la abre ante las niñas del parque. No es real.

Son mucho mas sutiles, preparan bien sus encuentros y se aseguran de no ser interrumpidos por nadie. Conquistan a sus víctimas y encandilan a todos los adultos de su alrededor para que jamás sospechen de él. Incluso ellos mismos dirán que su interés por el niño o niña es precisamente para evitar que un pedófilo se aproveche del menor. Y se termina dejando al "zorro al cuidado de las gallinas. "

Los adultos no son los únicos que abusan de niños. El agresor, estadísticamente hablando, suele ser un hombre adulto, pero también puede ser una mujer, un adolescente u otro niño no mucho mayor que tú.

Pueden ser compañeros del colegio, o hermanos no mucho mayores que ellas o ellos.
Es muy habitual que un niño no sea abusado sólo por un adulto.

Los abusadores Son personas como tú, totalmente integradas en la sociedad, que en ocasiones gozan de prestigio social, y se aprovechan de su gran integración social precisamente para mantener a sus víctimas en el silencio durante años. ¿Quién te va a creer, con lo buena gente que es? Es imposible.

Un pedófilo tiene de media nueve niños/niñas en su historial antes de ser descubiertos.

No olvides que el abuso sexual no es una simple cuestión de sexo, sino de poder. Es una manera de agredir a otro que sabes que está en inferioridad de condiciones para someterlo a tu voluntad. Si abusas de un niño, harás de él lo que quieras.

La familia :

Con el tema familiar se puede hacer todo un tratado. Porque hay de todo. Muchas veces la familia quiere tanto a todos sus miembros que no saben o no pueden creer que eso pase en casa. Les parece imposible que su hermano, su cuñado, su padre, el abuelo, el sobrino, su propio hijo o su marido haya traicionado a la familia de esa manera. Y lo niegan, simplemente se niega.
Nunca subestimes el poder de la negación. No se da cuenta nadie. No se quiere ver. Y si alguna vez se percibe “algo raro” automáticamente se piensa que se están malinterpretando las cosas, porque esa persona que conocemos es imposible que haga esas cosas. Y si las evidencias son claras, tal vez intentes “vigilar” un poco mas para que no se repita, pero poco mas.
En muchos casos todo el mundo sabe quien es el abusador y nadie hace nada.

Los niños:
Los niños no incitan, los engañan. Precisamente caen el las redes de su abusador por su inocencia. De eso se aprovechan los pederastas.

Un niño no es rencoroso. No sabe enfadarse con nadie el tiempo suficiente como para que no vuelva a dirigirle la palabra. Ni siquiera cuando se siente traicionado.

Todos enseñamos a nuestros hijos que hay que hacer lo que mandan todos los adultos: papá, mamá, el abuelo, la tía, la profesora, el conserje del colegio, el cura de la catequesis… Y son incapaces de decir “no” porque no saben que pueden decir que no. Nadie les ha enseñado que esa orden de un adulto no se obedece. Cuando quieren apartarse de ello sienten que ya no pueden porque uno de los primeros engaños es que están siendo cómplices de un delito, y que si alguien se entera los acusarán a ellos, no a su abusador. Si te has creído durante diez años que existía Papa Noel, los Reyes Magos o el Ratoncito Pérez, te crees cualquier cosa que te diga un adulto.

Un niño no miente.


Puede creer lo que le digan, y si te sientas con un niño para que te cuente cómo es el Ratoncito Pérez te das cuenta en seguida que es una fantasía porque él mismo añadirá detalles fantásticos con intención de hacer el relato mas interesante, porque cree en ello, le gusta, y su imaginación lo hará ser mas creativo. Pero si le pides que te describa cómo prepara mamá las tostadas del desayuno, es muy posible que te sorprendas de su calidad en detalles. Los niños no mienten ante eso, porque una experiencia traumática no incentiva su imaginación. Al contrario, la mata. Los niños no saben hablar de sexo si no lo conocen. La mitad de las víctimas no lo denuncian por primera vez de manera firme antes de pasar al menos cinco años.
Muchas víctimas morirán sin revelarlo.

Efectos:
Los niños no tienen capacidad para superar sus traumas. Pero tienen una enorme capacidad para sobrevivir a ellos hasta que puedan afrontarlos y superarlos. Algunos mecanismos para soportar los abusos han sido auto destructivos.

La prevención : ¿Porqué prevenir?
Se puede prevenir. Educando desde la sinceridad.

El secreto es romper el silencio de todos. Es hablar con los niños desde muy pequeños de sexo. Es decir, con dos o tres años, cuando lo bañas y esté aprendiendo las partes del cuerpo, por ejemplo que tenemos pies, dedos, cabeza, rodillas, cuello, ombligo... también hay que explicarle que los niños tienen Pene y las niñas vagina. Nada de la "cosita" o "eso". Las cosas tienen nombre. Utilicémoslo. Así sabrán explicarnos desde muy pequeños que "el primo me obligó a que le tocase su pene" Y en ese momento ya le puedes explicar que esas partes,.

Es falso que el asi sólo se da en el tercer mundo, en determinadas clases sociales, familias desestructuradas y nivel sociocultural muy bajo.

También sucede en Una sociedad rica, culta y avanzada, existen infinidad de casos en los que la familia es un ejemplo de virtud, buena posición social e influencia y existen abusadores.

Si salimos del ámbito exclusivamente intrafamiliar, el resto de los abusos se dan en el entorno mas conocido del menor.

Por ejemplo los sacerdotes pederastas. Normalmente son los curas de la parroquia o de la catequesis, que conocen a todos los miembros de la familia, o los profesores, esos que hablan con las madres y les dicen que su hija tiene un gran potencial pero debe quedarse en clase un rato mas porque él quiere ayudarla por puro altruismo y vocación en su labor de educador. O el vecino que insiste en que le dejes al niño con él mientras haces la compra semanal en el hipermercado.
Pero hay un dato mucho mas escalofriante. Los clientes de turismo sexual infantil en países del tercer mundo provienen de EEUU, España, Italia, Francia, Alemania, Bélgica y Australia en su mayoría. Los destinos más elegidos por los pedófilos son Bangkok, Camboya, Tailandia, Vietnam, México, Brasil, Guatemala entre otros. Esto mueve redes de prostitución infantil a nivel mundial y el negocio es muy lucrativo.

¿Qué debemos enseñar a los niños?


1. Debemos enseñar a los chicos que su cuerpo les pertenece y que nadie puede tocarlos sin su permiso.

2. Enseñarles que hay partes íntimas o privadas del cuerpo.

3. Respetar y saber que los niños tienen derecho a no querer que les den un beso o les toquen, incluso cuando se trata de una persona ala que quieren.

4. Los chicos no siempre pueden diferenciar bien las formas apropiadas e inapropiadas de tocar. Los mimos buenos y mimos malos, son distintos. Los mimos buenos son los buenos abrazos, besos y caricias, son muy lindos y siempre te hacen sentir bien, te hacen feliz, te ponen contento. Los mimos malos son los malos abrazos, malos besos y malas caricias, son muy feos, te hacen sentir muy mal, no te hacen feliz y te ponen muy triste.

5. Enseñar a los chicos a decir “No”, de manera inmediata y firme, a un contacto físico inapropiado, explicar que pueden decir “No” en cualquier momento. Debemos asegurarnos que sepan que pueden pedir ayuda a un adulto de confianza.

6. Enseñarles que hay secretos buenos y secretos malos. Los secretos buenos son, por ejemplo, un regalo que compramos para alguien o una fiesta sorpresa. Los secretos malos son los que los ponen tristes o los ponen nerviosos o los hacen sentir mal o incómodos. Los secretos malos no deben mantenerse.

7. Enseñarles que si no están seguros si el comportamiento de alguna persona es bueno, que pidan ayuda. Enseñarles a alejarse de situaciones que no les gusten. Enseñarles que no está bien que alguien mire o toque las partes íntimas o privadas de su cuerpo. O que les pidan que miren o toquen las partes íntimas de otra persona.

8. Enseñarles que si alguien les hace mimos malos, nunca, jamás es culpa de ellos. Debemos estar atentos al comportamiento de los chicos, cuando hacen algo que llama la atención o tienen cambios de humor; si están tristes, o callados, si están más ansiosos o peleadores o excitados, sin perder tiempo, debemos conversar con ellos sobre aquello que les puede estar pasando, sin asustarlos. No siempre algo diferente en el comportamiento de los niños implica un caso de abuso o maltrato, pero es conveniente que siempre preguntemos y escuchemos para ayudarlos.

Los chicos nunca tienen la culpa ni provocan las situaciones de abuso. No mienten cuando cuentan que fueron abusados o maltratados.
Debemos creerles aunque esto lleve a enfrentar a alguien de la familia. Es imprescindible escuchar a los chicos, creerles, y denunciar. El silencio o la negación hacen que el abuso siga ocurriendo. Si es que hay un error, no se perdió nada, de lo contrario, ¿a quién estamos preservando?,

Los chicos pueden percibir que alguna situación no está bien, pero puede que no sepan cómo explicarla ni a quién decírselo. Somos los adultos quienes debemos estar atentos y ser receptivos.

¿Como entras tú en el abuso sexual infantil?


Tu silencio es cómplice. Si no ayudas a romper estos mitos, seguirán funcionando y las víctimas seguirán sintiendo vergüenza de hablar de sus abusos.

Porque el silencio es lo que condena a una infancia destruida y romperlo es lo que me sana. Y a nivel de denuncia igual. Si se calla se acaba protegiendo al agresor y a las redes de prostitución. Ni enfermos, ni locos, ni nada. Si no denuncias, si no ayudas a eliminar estos mitos, si no apoyas un cambio en las leyes que regulen y condenen con mas contundencia todos estos hechos, estás ayudando a perpetuar el delito y a que los delincuentes permanezcan impunes.

Conclusiones
Porque tenemos que aceptar que tres de cada diez niños serán abusados?
El abuso sexual infantil es y será siempre el delito mas atroz en
Contra de la humanidad.
Porque atenta contra el tesoro mas sagrado de la familia.
Sin niños sanos no hay futuro.
Hasta cuando mas escucharemos gritos sin voz?

La invitación es a tomar conciencia, no lamentar y actuar.

El abuso sexual infantil es un delito voraz, lapidante y que fulmina.
Como sociedad damos bandazos llenos de morbo cada vez que en la palestra los medios hacen la nota.
Los medios se convierten en el juez manipulador de las masas que trazan el veredicto final.

Después del escándalo viene el Olvido.Quedando entonces en el colectivo hispanoamericano un mensaje de impunidad, de la no denuncia y de los derechos del niño violados.
¿Donde esta el derecho superior del menor?
¿Donde están aquellas grandes campañas de los medios que defendían al menor del abuso sexual infantil?
¿En donde quedan las miles de víctimas de abuso sexual infantil?
¿Como brindar esperanza y justicia y lograr la reparación del daño?
¿Que le podemos decir a las víctimas de abuso sexual infantil cuando piden auxilio?
¿Solo les podremos brindar ayuda psicológica?
¿Porque solo en los casos de abusos sexual en adultos hay justicia?

¿ Porque tenemos que aceptar que tres de cada diez niños serán abusados?
El abuso sexual infantil es y será siempre el delito mas atroz en
Contra de la humanidad.
Porque atenta contra el tesoro mas sagrado de la familia.
Sin niños sanos no hay futuro.
¿Hasta cuando mas escucharemos gritos sin voz?

La invitación es a tomar conciencia, no lamentar y actuar.
No esperemos que alguien mas lo haga, nada te cuesta y salvaras a miles de niños.

Nadie en su sano juicio puede ver sufrir a un niño.
Si apareciera una enfermedad que torturara todas las noches a los niños, que los dejara sin dormir, que los obligara en algunos casos a cortarse, que les impidiera ser felices y que en algunos lamentables casos les obligara a quitarse la propia vida, probablemente los gobiernos y laboratorios invertirían millones y millones de dólares para encontrar la cura.
Esta situación existe y no es una enfermedad es un delito hacia los niños.
El abuso sexual infantil afecta a millones de niños, les afecta psicológicamente gravemente si no son ayudados y atendidos profesionalmente y de manera oportuna, tal vez el daño dure por el resto de sus vidas.

Pero no solo se trata de ayudar a los niños víctimas se abuso sexual infantil.
También tenemos prevenir y EVITAR el abuso sexual infantil, así de simple es y a la vez así de complicado se convierte.

Pero por otro lado aunque parezca increíble, tristemente a la mayoría de las personas no les importa nada en absoluto el peor crimen contra la humanidad.

Lastimosamente tal vez solo les importara cuando el delito les afecte de manera directa.

Cada año, más de un millón de niños son conducidos de fuerza al mercado sexual y millones abusado sexualmente.

Casi cada día escuchamos hablar de nuevos casos de abusos sexual infantil, tres de cada diez, si tres de cada diez serán víctimas sexuales.

¿Que podemos hacer?
Solo con el aumento de medidas preventivas, la mejora de las técnicas de protección, la sensibilización de la opinión pública y el estímulo de la denuncia podremos lograr un verdadero cambio, estas sencillas medidas nos aparecen claramente como la manera más inteligente y eficiente de abordar el problema.

Juntos creémos una cultura de prevención.

Los abusos y la explotación de la infancia (especialmente a nivel sexual) constituyen un problema universal y alarmante, por lo que medidas eficientes y sostenidas de prevención y de protección son necesarias, ya sea a nivel familiar, local, nacional o internacional.

Tras una larga tradición de silencio, los abusos sexuales de los que son, muchas veces, víctimas los niños, hacen cada vez más objeto de revelaciones y ocupan un sitio eminente en la escena pública y política.

Pero no podemos solos, esta claro
Que los gobiernos no harán nada al respecto hasta de los ciudadanos lo realicemos por cuenta propia.

Participemos en formar parte de la Red hispanoamericana contra el abuso sexual infantil.

Todos podemos formar parte de ella y replicar nuestro repudio al al abuso.

Lo podemos hacer en nuestros países por nuestra profesión o actividad si podemos o queremos ser replicadores y atender a las víctimas o participar en prevenir mediante campañas de prevención.

Esto debe ser solo el comienzo, la sociedad civil tiene que realizar su función en esta problemática para que los gritos no sean sin voz.

El abuso sexual infantil es algo tan común, que todos quieren cerrar los ojos al verlo.

Ni un niño mas, juntos hacemos mas.
Abuso sexual infantil nunca mas.

"campaña permanente No mas gritos sin voz" .

Porque "Todos conocemos a un sobreviviente de abuso sexual infantil."

http://migueladame.blogspot.mx/
http://redcontraelabusosexual.blogspot.mx/
http://forosobrevivientesasi.blogspot.mx/
http://asinuncamas.org/
adame.miguel@yahoo.com.mx


Pesadilla: Abuso Infantil http://t.co/NcN7Y0q7 vía @youtube

http://www.avaaz.org/es/petition/ABUSO_SEXUAL_INFANTIL_NUNCA_MAS/?ktrCBdb

Muchas gracias


Miguel Adame Vazquez
Padre de familia.
Creador de a.s.i nunca mas.
Presidente de Centro de investigación difusión y estudios sobre la trata de perdonas y explotación comercial a.c
Candidato al premio al mérito cívico 2010/2012.
Fundador de la red hispanoamericana contra el abuso sexual infantil.
Colaborador del grupo de ayuda mutua para sobrevivientes de abuso sexual infantil.

Con la colaboración A. Montes. 

Tomado de: http://migueladame.blogspot.com/2012/12/decalogo.html